Hace unos días organicé un taller sobre visualización de metas para un equipo de distribuidores de una importante multinacional americana.

Lo cierto es que era un poco arriesgado y no estaba seguro de si les gustaría o si entenderían su función, así que decidí prepararlo y acompañarlo de bastante documentación científica que explicara su funcionamiento.

El ejercicio consistía en guiar a los participantes por un viaje a su futuro, en el que entrando en un estado de ralajación profunda se visualizarían a si mismos habiendo conseguido todas sus metas. Para conseguir una visualización efectiva debían pensar en imágenes de manera clara y nítida, e implicar al mayor número de sentidos. Por esta razón les preguntaba constantemente cómo se sentían, a qué olía, cómo era el tacto…

La sensación de verte a ti mismo habiendo alcanzado todas tus metas, satisfecho, relajado, feliz, sin preocupaciones, te acerca más a esos objetivos. ¿Cómo es esto posible?

El por qué de la visualización de metas

Para poder explicarlo debemos entender qué es el Sistema de Activación Reticular o SAR. Simplificándolo mucho es una especie de malla protectora que  filtra la inmensa cantidad de información que recibe nuestro cerebro. No podríamos estar pendientes ni almacenar toda esta información, por lo que el Sistema de Activación Reticular sólo deja pasar aquella que nos ayuda a resolver alguna situación. Pero para ello debemos indicarle metas previamente. Seguro que con algún ejemplo lo ves más claro.

¿Te has dado cuenta de que cuando vas a comprar un determinado modelo de coche, derrepente ves ese mismo modelo por toda la ciudad? ¿Justo ha crecido el volumen de ventas de ese modelo? No, símplemente estás muy focalizado en él y el SAR lo capta muy bien.

¿Y si te pregunto qué información de toda la que recibiste a lo largo de las últimas 24 horas te resulta de utilidad para cultivar girasoles? Lo más probable es que respondas que ninguna, pero seguro que algo podría haberlo sido, símplemente tu cerebro no tenía ese objetivo y lo dejó pasar.

Y aquí es donde se hace efectiva y útil la visualización de metas. Si hacemos de manera correcta este ejercicio y lo repetimos regularmente, nuestro cerebro tendrá la sensación de haberlo vivido. Tendrá claros los objetivos y se pondrá en alerta para aprovechar todo aquello que nos permita acercarnos a esas metas.

Por otro lado tendremos presente las sensaciones que obtendríamos al conseguir esas metas, y el cerebro no sabrá distinguir si realmente las hemos vivido o las hemos imaginado. Y esta es una herramienta muy potente que podemos utilizar cuando tengamos un mal día y nos estemos planteando abandonar algún proyecto.

Es una técnica muy utilizada en los deportistas de élite. Incluso hay algunos que opinan que el entrenamiento mental con la visualización es prácticamente tan efectico como el entrenamiento físico.

Siento decirte que sólo con ejercicios de visualización de metas no conseguirás la casa de tus sueños, el negocio perfecto, la familia que deseas o el tiempo libre que necesitas para disfrutar de todo lo anterior. Pero si puede ser un paso inicial para enfocarte en lo que quieres y tener una herramienta potente para no abandonar.

Así que visualiza, sueña, ponte en acción y nunca, nunca, nunca abandones.

Visualizacion de metas - Yago Uribe

 

Si te ha gustado este post, por favor compártelo y déjame tus comentarios.

 

GuardarGuardar